domingo, 27 de noviembre de 2011

Bonitos, esquivos amigos

Habitualmente con el final del verano, se empieza a notar un ligero repunte en la actividad de especies como melvas, bacoretas, llampugas y como no bonitos. Este año parece que los ciclos se han atrasado un poco, debido posiblemente a la elevada temperatura del agua, que hasta bien entrado el mes de octubre rondaba los 23 grados. Otro aspecto que también ha podido influir ha sido la escasez de lluvias, que sin duda ha limitado el aporte de nutrientes al mar a través de ríos y rieras, por lo que los peces pasto tienden a buscar otros emplazamientos para alimentarse, lo que origina que sus depredadores sigan su camino.
Al final nuestros insaciables torpedos acudieron a su cita, en las jornadas que les dedicamos básicamente a curricán, nuestras amigas y delatoras gaviotas, formaban pajareras espectaculares en innumerables lugares. Sólo había que actuar de manera adecuada para maniobrar la embarcación y darle tiempo a las muestras para que pasasen por el lugar preciso.  Con un mar rizado en superfície por la acción del viento, las condiciones eran las ideales para engañar a unos y a otros.

Todo y que dar con los bonitos no siempre es una labor fácil, ya que estos acostumbran a ir acompañados de otro tipo de depredadores, conseguimos levantar unos cuantos que todo y no ser de grandes dimensiones, rondarían los 3kg., nos brindaron unos excepcionales momentos de lucha, ya que como bien sabeis son duros de pelar y hasta que no los tienes dentro de la sacadera, no puedes dar por finalizada la batalla.


En los días de mayor actividad llegamos a capturar más de 20 piezas, entre bonitos, melvas, bacoretas y estorninos, de las que solo unos pocas nos alegraron la mesa.
Alguna gaviota también quiso probar las plumas con las que pescábamos, soltándose afortunadamente sin necesidad de que tuviésemos que intervenir.

lunes, 21 de noviembre de 2011

Delta del Ebro una visita deseada

Tal y como indica el título de este post, la visita al Delta del Ebro fue totalmente inesperada, pero no por eso poco planificada y preparada. Al frente de todo estaba mi mujer, sufridora y cómplice de mí segunda mayor pasión (la pesca), la primera me vais a permitir que la guarde para mí, aunque ya os la podeis imaginar. Con ella al mando, no hay duda de que ningún cabo quedará al azar.
No voy a descubrir a estas alturas que el Delta, es uno de los paraísos para cualquier pescador deportivo, tanto desde embarcación como desde costa. Como colofón a mí regalo de cumpleaños, estaba organizada una jornada de pesca en este lugar tan emblemático y en mi caso, poco visitado a pesar de la relativamente escasa distancia a la que estamos.

El lugar elegido fue la playa de Sant Antoni, justo en el margen derecho de la desembocadura del río Ebro y al que si no tengo mal entendido, solo se puede acceder a través del mismo río o el mar y con la ayuda de una embarcación. Bueno, pues una vez desembarcados, allí que nos instalamos con todo lo necesario para abordar una larga jornada de pesca nocturna.
El objetivo era bien sencillo y se cumplió con creces tan solo con llegar al lugar de pesca, ¿que más se puede pedir? un lugar excepcional donde los haya y una compañía inmejorable, el tema pesca si no hubiese funcionado, pues tampoco hubiese pasado nada. Pero dentro de lo que cabe, la cosa no se dió del todo mal, a pesar de que las capturas fueron muy abundantes, los tamaños fueron contenidos.

Doradellas, corvinas, jureles e incluso una anjova acudieron a su cita. Echamos de menos la captura de alguna lubina, pero por las fechas en las que fuimos y el estado totalmente en calma de la mar, hacía algo complicado el engañar a esta esquiva especie, aunque todo llega...

jueves, 10 de noviembre de 2011

Palometones a spinning y curricán

Después de un período de "desconexión obligada" (vacaciones) ya estamos de vuelta. Un tiempo que entre otras tantas cosas, he aprovechado para disfrutar de la pesca en varias de sus modalidades.
Hubo jornadas de todo tipo, unas abundantes en capturas y otras en que estas escasearon, pero como ya es de todos conocido esto es lo más habitual. Lugares idílicos como el Delta del Ebro, la playa del Estartit con las Islas Medas siempre espectantes, fueron algunos de los lugares elegidos y como no, las playas de Tarragona y un poco más al norte Blanes, que por varias razones son lugares fijos de peregrinaje y pesca.
El material fotográfico para una parte del contenido de este post, me ha costado un poco recopilarlo. Principalmente porque una de estas técnicas, en concreto el spinning no es de las que más me haya atraído, como ya he apuntado en algún otro post, pero como bien dice algún compañero en cuanto te haces con las primeras, que no fáciles capturas, ya estás enganchado...
En una de estas jornadas y acompañado de un fenomenal teacher, tuve la oportunidad de experimentar la potencia de uno de estos preciosos animales, una pelea sin duda del todo apasionante y noble. No me puedo imaginar combatir con un ejemplar, de esos que todavía hay por el Delta del Ebro y que sin dificultad superan los 20 kg de peso, pero todo llegará, espero. En nuestro caso el combate fue con un par de ejemplares que rondarían los 7/8 kg, con equipos relativamente ligeros, cañas de acción contenida y carretes de tamaño 4000 cargados de línea trenzada de 0.20 mm, rematado con un terminal de fluorocarbono del 0.50. Al final un buen señuelo de superfície al que darle marcha y a insistir, insistir e insistir, no hay otra fórmula. El subidón de adrenalina está asegurado, cuando de la nada aparece uno o varios misiles persiguiendo tú engaño y de repente zas, el más "listo" de la clase se lleva el susto de su vida y a ti de regala con un momento inolvidable.

También los tentamos a curricán con artificiales y con cebo natural, pero este año ha sido algo más complicado hacerse con buenas capturas, también es cierto que no hemos insistido como otros años y que la zona además ha sido castigada en demasía y estos excesos, al final se acaban pagando...