Las espectativas que llevábamos, a pesar del poco tiempo del que disponíamos, eran altas. Un buen amigo, nos había facilitado los lugares por los que rastrear y las especies que podíamos pescar, ya que él anteriormente había viajado a Saïdia. Anjovas, palometones, lubinas y cambiando un poco el escenario y el fondo alguna sama, con suerte. Pero como ya sabemos, el mundo de la pesca no es una ciencia exacta, no bastaron nuestros conocimientos y la información recibida, el dichoso levante hizo acto de presencia y el tiempo no nos acompañó, lluvia, un mar muy molesto y excesivamente turbio por la cercanía de la desembocadura del río Moulouya (había llovido los días anteriores), hacían difícil el objetivo. Así que de los dos días previstos de pesca, sólo pudimos aprovechar unas horas, el primer día por la mañana. Señuelos de un color, de diferentes tamaños, con babero, sín babero, con más babero.... y nada.
El día antes de nuestra vuelta a la Península, coincidimos en el hotel con el Sr. Lorenzo Roca, "viajero empedernido", visitante habitual de todos los Océanos y gran pescador, colaborador de la revista Pesca a Bordo. Venía a probar suerte con las lubinas y demás...
Desde aquí quiero agradecer, el trato recibido por parte de Pascal, Mohammed y sobretodo de Robert y Sergi.
Seguro que volvemos.
Hola!!!
ResponderEliminarYa estoy por aqui, me ha pasado lo mismo, me he tenido que venir era imposible pescar por el viento asi que desisti pero volvere el fin de semana. Me encanta tu blog, asi que me queda una asignatura pendiente que ahora por falta de tiempo me es imposible, leer lo todo. Pero estoy en semana de pesca, y seguro que me entiendes.
Estamos en contacto.
Un saludiño y buena pesca.
Gracias Tanero,
ResponderEliminarEspero que la próxima salida vaya mejor. Esta semana ha sido muy muy floja, el tiempo del fin de semana ha sido HORRIBLE.
Saludos